La mozzarella italiana es el queso fresco que más se consume en la gastronomía italiana. Suele tener una amplia variedad y múltiples usos.
En la medida en que este producto sea más fresco y sabroso, tendrá más suavidad, sabor, frescura y elasticidad.
¿Cómo elegir mozzarella italiana?
Cuanto más fresca sea la mozzarella italiana para pizza, se va a necesitar menos cantidad para preparar cada pizza.
Así pues, la pizza tiene que elaborarse con leche fresca pasteurizada de vaca, cuajo, sal y fermentos lácticos, lo que tiene que dar como resultado un queso fresco y aroma a leche, exento de sabores a mantequilla y otros aromas atípicos.
La normativa italiana exige que para garantizar la seguridad alimentaria, la mozzarella italiana debe hacerse a partir de leche pasteurizada. Este será un producto bueno cuando se mantenga blanco, suave e hilado en la boca, así como con puntos dorados resecos al salir del horno.
De igual modo, no debe dejar un exceso de humedad sobre la pizza, por lo que tiene que mantener su sabor, calor y aroma casi como si no hubiese estado en el horno.
En definitiva, para elegir la mozzarella italiana, hay que tener en consideración el tipo de plato que se preparará. Por ejemplo, algunas opciones de mozzarella para pizza napolitana son “fior di latte”, o, la mozzarella Stg.
¿Cómo conservar correctamente la mozzarella italiana?
Es recomendable tener en cuenta las indicaciones del fabricante en el etiquetado para conservar en buen estado la mozarella italiana.
Asimismo, es importante señalar en este sentido que la mozzarella para pizzas es un producto fresco, por lo que debemos mantenerla en condiciones favorables para prolongar su caducidad.
En este sentido, lo recomendable es usar suero láctico, ya que este permitirá que las propiedades organolépticas de este producto se puedan mantener por periodos mucho más prolongados.
¿Cómo conservar un paquete de mozzarella abierto?
Cuando un paquete de mozzarella italiana es abierto, se puede guardar una parte y comerla otro día.
De este modo, no es necesario volver a meter en líquido este producto, es decir, no se tiene que introducir en el suero que viene ni tampoco en agua.
Entonces, ¿cómo se debe guardar la Mozzarella? La mejor alternativa consiste en hacerlo en un papel de plástico, porque el de aluminio es mucho más poroso, y por dichas razones, el aire puede llegar a atravesar el envoltorio.
También es importante que la mozzarella se mantenga en la nevera durante un periodo que no sea superior a un par de días, puesto que de ese modo es posible evitar que lleguen a perder sus propiedades organolépticas, o este producto caduque.
¿A qué temperatura se debe conservar la mozzarella italiana?
La mozzarella italiana se debe conservar refrigerada a unos 4 °C de temperatura. Para ello, debe almacenarse en un recipiente de vidrio con tapa hermética o envuelto en papel film, de modo que pueda mantener su humedad en la nevera.
En estas condiciones, puede durar entre 7 y 10 días más o menos, lo cual suele variar en función de la fecha de vencimiento; su cuidado durante el proceso de fabricación y la conservación del distribuidor, así como del consumidor.
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